La demanda de potencia en el partido, o días de eventos para estadios y arenas puede aumentar a más de 5 veces respecto de la carga base habitual de energía consumida. Gestionar la demanda máxima de energía es fundamental tanto para el establecimiento como para la estabilidad de la red local.
Dado que las redes de energía locales a menudo trabajan cerca de su capacidad, los estadios y arenas deben garantizar que haya una fuente de alimentación resistente disponible durante todo el evento. Para reducir o mitigar el riesgo de cortes de energía y minimizar las cargas por demanda pico, los estadios y arenas a menudo utilizan fuentes de energía alternativas, como generadores diésel. El almacenamiento de energía proporciona una alternativa atractiva a la energía generada a diésel desde una perspectiva tanto de costo como ambiental. La energía solar o eólica renovable, generada en el sitio por la sede, puede almacenarse mediante las baterías y usarse cuando sea necesario; de esta manera, se optimiza el uso de energía renovable disponible. Aunque no haya fuentes renovables, las baterías pueden cargarse durante períodos de baja demanda y utilizarse para reducir los picos durante un evento importante.